Hoy vamos a platicarte sobre una distinción fundamental que debes de conocer cuándo hablamos de las baterías para vapeo.
Si bien, en apariencia las baterías para los cigarrillo electrónicos parecieran idénticas, hay toda una serie de especificaciones detrás de cada una de ellas.
Y hoy vamos a hablar de un tema importante: los dos tipos de baterías que vas a poder encontrar en el mercado.
¿Para qué sirve la batería de tu vapeador?
Para simplificar las cosas, podríamos decir que los cigarrillos electrónicos están compuestos por dos partes importantes: el claromizador y una batería.
El claromizador, como ya lo hemos platicado en otras ocasiones, es el encargado de calentar el líquido y convertirlo en el vapor. Y la batería, es el encargado de generar la energía suficiente para que esto suceda.
Por ello, la batería toma un papel fundamental en tu experiencia de vapeo.
¿Cuáles son los tipos de batería?
En el mundo del vapeo, de acuerdo a su funcionalidad, existen dos tipos de baterías: las automáticas y las manuales.
Las automáticas son aquellas que se activan directamente cuando soplas en ellas. Y las manuales, las cuales se activan cuando pulsas el botón de tu cigarrilo.
Las baterías manuales ofrecen un mayor control sobre el calentador en el interior del cartucho, debido a que se caliente el líquido justo antes de dar una calada. Las baterías manuales para vapeo son las más utilizadas por los vapeadores experimentados ya que también permiten un vapor más denso en comparación con las automáticas.
Las baterías automáticas en cambio, son muy prácticas de utilizar y son más populares entre los vapeadores que van iniciando o que tienen poca experiencia. De hecho, es la recomendación para todas las personas que apenas van iniciando. Estas baterías si pueden generar más vapor pero para ello, debes de dar una calada larga y profunda.
Y tú, ¿cuál utilizas?
Agregado al carrito