La experiencia de vapeo puede verse afectada cuando empezamos a sentir que nuestro equipo no rinde como lo solía hacer y cuando empezamos a notar un sabor a "quemado" en nuestros eliquids favoritos. Y cuando esto llega a suceder, nos preguntamos ¿qué pudo haber sucedido para que nuestros equipos se vieran afectados?

Por ello, hoy traemos para ti algunas de las causas más comunes que pueden llegar a afectar nuestra experiencia de vapeo:

1. No se empapó bien la resistencia

Una de las causas más habituales de este "quemado" es el que el líquido del depósito no ha conseguido empapar correctamente el algodón de nuestra resistencia. Por ello, al calentarse el algodón, éste no tiene líquido y en consecuencia se quema ligeramente provocando el molesto sabor a quemado. Lo ideal es asegurarnos que los algodones están correctamente humedecidos con líquido para evitar este sabor.

2. No vapear del modo correcto

Y con esto nos referimos al famoso "quemado en seco". El cual sucede cuando das una calada muy suave y no se obtenga la intensidad adecuada para que entre suficiente líquido. Por ello, siempre es recomendable dar caladas fuertes y a pecho para asegurarnos de que se drene el líquido correctamente.

3. No vapear a la potencia correcta

Muchas veces intentamos vapear a una potencia mayor que la que permite nuestra resistencia. Por ello, lo ideal es vapear subiendo poco a poco la potencia y hasta donde nos permita nuestra resistencia el evitar el sabor a quemado.

4. El líquido incorrecto

Y por último y no menos importante: los líquidos. Y es que algunos líquidos no funcionan bien con determinados modelos de baja potencia. Principalmente los que tienen mayor concentración de glicerina vegetal (VG) que propilenglicol (PG). La glicerina suele producir más vapor que el propilenglicol pero también es más densa por lo que le cuesta más entrar en el algodón de la resistencia. Si tienes sabor a quemado a menudo, es posible que el líquido sea demasiado denso.