¡A todos nos puede pasar! Dejamos nuestros equipos en un lugar muy vulnerable y se nos cae. Lo llevamos en el bolsillo y por las prisas se sale y se estropea. O bien, justo lo acabas de sacar de la caja, no mediste bien tus movimientos y se te resbala de las manos. Estas y muchas otras situaciones pueden ocasionar que tu equipo caiga accidentalmente y se rompa. Pero ¿qué hacer en estos casos?
Hoy hemos preparado una guía de supervivencia ante este tipo de situaciones, lo que si te podemos adelantar es que, ¡no cunda el pánico! Y a seguir estos pasos:
1. Mantén la calma
Sí, nunca está de más decirte que lo primero que debes de hacer es mantener la calma y no estresarte. Muchas veces puede más la situación emocional que la racional y esto nos puede llevar a hacer cosas que empeoren la situación. Por ello, lo primero que debes de hacer en estas situaciones es respirar profundo, mantenerte en posición firme y afrontar las consecuencias.
2. No lo uses
Ya que has guardado la calma y estés tranquilo, jamás se te vaya ocurrir utilizar tu vaporizador roto. Lo que debes de hacer, de ser posible, es vaciar el líquido que haya quedado y dejar de usarlo para ir al siguiente paso.
3. Evalúa los daños
Si se te cayó tu vaporizador, lo más probable es que el cristal se haya estrellado. Por ello, es necesario desarmar por completo tu equipo y revisar que el resto de sus componentes estén en buen estado: las resistencias, las boquillas y todas las piezas que tenga tu equipo.
4. Utiliza el cristal de repuesto
Ahora llegó el momento de utilizar un cristal de repuesto. Te puedes apoyar con unas pinzas puntiagudas para sacar el cristal anterior y asegúrate de eliminar todos cristales que puedan quedar en su interior. Lo más común es que tu equipo venga con un cristal de repuesto, pero si no, puedes comprar un repuesto en cualquier tienda de vaporizadores.
5. Arma tu cristal y verifica que no tenga fugas
El último paso que nos queda es el embonar tu cristal y verificar que esté bien ensamblado. Para ello, es recomendable llenar tu equipo con el líquido que vas a usar, vapear y asegúrate de que no haya fugas. Si las hay, vuelve a desmontar y montar tu cristal hasta que te asegures que las piezas están colocadas correctamente.
¡Y listo! Con ello podrás disfrutar tu equipo de nueva cuenta y estrenarlo como si fuera nuevo, y a ti, ¿ya se te ha estrellado algún cristal de tus equipos?
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