¡Año nuevo, equipo nuevo! Y aunque no haya sido tu caso, no debes olvidar que es muy importante que conozcas y estés familiarizado con tus e-cigarettes. Y al conocerlo, no solo nos referimos al cómo usarlo, si no al cómo mantenerlo en perfectas condiciones.

Y no eres el único. Algo que nos sucede a todos como vapers es que, por lo regular, dejamos de lado las rutinas de limpieza y mantenimiento de la mayoría de nuestros gadgets y electrónicos hasta que algún día llegan a tronar y dejan de funcionar.

Por ello, hoy queremos compartir una serie de consejos breves y directos para que puedas sacarle el máximo provecho a tus dispositivos y no te esperes hasta el último minuto para tomar cartas en el asunto.

¿Estás listo?

1. Cómo rellenar el depósito

Rellenar el depósito de tu cigarro electrónico suele ser una de las actividades que hacemos día con día y que, si no lo hacemos con el cuidado necesario, nos puede estropear el equipo. Por ello, siempre que vayas a rellenar tu depósito hazlo lentamente, de manera vertical y cuidado que el líquido es vertido por la pared de este. De esta manera evitaras encharcar tus resistencias y que el líquido empiece a gotearse. Asegúrate de cerrar tu depósito de manera correcta sin forzar o apretarlas en exceso.

2. Cuándo rellenar tu depósito

Nunca de los nuncas permitas que tu depósito se quede vacío, a menos que necesites cambiar de sabor. Al ver que el líquido está por terminarse, es momento de rellenar tomando los consejos del paso 1.

3. Limpieza continúa

Limpiar continuamente tus equipos también te evitará muchos problemas. Se aconseja limpiar de manera cotidiana las conexiones eléctricas, roscas y boquillas. Lo ideal es utilizar servilletas, papel de cocina o un pañuelo. De esta manera ayudarás a secar el líquido almacenado en las roscas y boquillas de tu equipo. Si detectas fugas, lo más recomendable será que desmontes tu equipo y vuelvas a armarlo asegurándote de revisar todas las conexiones. Si el problema persiste, probablemente sea momento de cambiar alguna parte.

4. Cómo transportarlo

La manera en que transportas tus equipos también es importante. Lo más recomendable es llevar tus equipos siempre apagados y en lugares seguros. Si lo llevas en tu pantalón, asegúrate de no sentarte sobre él y evitar los golpes y derrames de líquidos. Nunca dejes tus equipos en el automóvil o expuestos a la luz solar y el calor. Si vas a bajar de tu coche, no olvides llevar tus equipos contigo.